Esta novela es tan atrapante que ayer, un día de temporal en mi ciudad y mi país, logré terminar a pesar de que se iba la luz todo el tiempo y muchas veces lo leí en la semioscuridad, en serio, no podía parar hasta terminar.Paris Gibson, es una famosa locutora de radio de la que sus oyentes sólo conocen su voz, nadie sabe como es ella. A ella le gusta así, proteger su intimidad detrás de lentes oscuros (tiene una alta sensibilidad a la luz a raíz de un accidente que significó una larga agonía para quien iba a ser su esposo).
Ella pone las canciones que sus oyentes solicitan, a veces simplemente quieren hablar y contarle cosas, ella les escucha y les da consejos y pasa al aire algunas de esas llamadas. Su programa acompaña las altas horas de la noche y la madrugada en que casi todos están durmiendo, pero no todos y la popularidad de su programa lo demuestra.
A una de esas tantas llamadas, Paris contesta y su interlocutor, que se identifica como Valentino le dice que por su culpa su novia pretendía dejarlo... Por eso la tenía atrapada en un lugar secreto y le daba a Paris 72 horas para localizarla o la chica moriría y además Paris sería su siguiente objetivo, asustada y preocupada, ella acude a la policía, nadie puede asegurar que Valentino esté diciendo la verdad, pero ante la duda prefieren investigar. El detective a cargo recurre al Psicólogo de la Policía para hacerle escuchar la grabación que Paris se encargó de pasar a un cassette. Lo que el detective ignora es que Paris y el Dr Dean Malloy ya se conocen y de hecho comparten un pasado turbulento y doloroso...
No puedo decir nada más. simplemente recomendar este libro a quienes gusten del misterio salpicado de adrenalina, donde cuando parece que ya todo está resuelto, la escritora se encarga de darte la vuelta y dejarte totalmente desorientado. Me fascinó.
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