Empecé a leer este libro tiempo atrás y lo dejé de lado por otros que atraparon mi curiosidad, pero eso no le resta méritos porque disfruté de su lectura en cada página y en casi cada página me descubrí riendo sola.Es un libro maravilloso.
¿Qué harías si el fantasma de tu tía-abuela de ciento y tantos años te persigue para que encuentres un collar que se le ha perdido quien sabe donde? Pero el fantasma de Sadie no tiene 105 años, sino 26 y quiere divertirse hasta que Lara logre encontrar su tan adorado collar, sin el cual Sadie no podrá descansar en paz. Este es el punto de partida para las situaciones más hilarantes que uno pueda imaginar, desde parar un funeral hasta salir con un completo extraño sólo por cumplir los caprichos de un fantasma con mucho carácter y mucho estilo.
Por supuesto, mientras buscan el collar, entre las dos mujeres - que no se conocían en vida - empieza a forjarse una estrecha amistad capaz de atravesar las barreras del tiempo y de la muerte misma. Nace un afecto entrañable que le da su toque de ternura y humanidad a esta novela.
Esta es la segunda novela que cae en mi poder escrito por Sophie Kinsella y debo decirlo, me anoto a todas las que encuentre de ella porque su estilo me fascina. Me río sin parar con sus libros. Son el antídoto efectivo para levantarle el ánimo al más negativo lector.
Es una lectura más que recomendada.
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