En los márgenes del río Batzan, en el valle de Navarra aparece el cuerpo desnudo de una adolescentes en circunstancias que ponen su caso en relación a otro asesinato ocurrido en los alrededores un mes atrás, La encargada de investigar el caso, Amaia Salazar, inspectora de homicidios de la Policía Foral, regresa a su natal Elizondo detrás de las pistas del asesino, a la vez que se ve enfrentada a viejos demonios que la persiguen desde su niñez. ¿Podrá ella resolver el crimen antes de que el asesino vuelva a atacar? ¿Vencerá ella sus demonios originados en una experiencia traumatica de la que toda su vida a intentado escapar?...Un libro donde se mezclan las técnicas forenses modernas propias de CSI con las viejas costumbres de su pueblo. Viejas creencias y personajes de la mitología regional que parecen no querer perderse en la noche de los tiempos, sino que rondan la vida cotidiana como guardianes de la naturaleza.
Un libro que se lee sin pausas.
Gracias Jacquie por recomendármelo
Y, aunque todo parece haber llegado al final, sospecho que aun me esperan sorpresas puesto que este es apenas el primer libro de la trilogía.. Me despido, me voy a leer el libro que sigue
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